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 El Personaje Japuana.
Entrevistamos a Javier Esturillo Puerta.
Periodista, desde las trincheras de la información.

Nací en la primavera de 1974 en Linares. Fui un niño inquieto, culo de mal asiento, al que siempre le fascinó el mundo del periodismo. De hecho, antes de cumplir la mayoría de edad, fundé Onda Joven Radio con un grupo de amigos. Luego me marché a estudiar Ciencias Políticas en Granada y acabé en Relaciones Laborales en la Universidad de Jaén. Periodísticamente me formé en Diario JAÉN, la mejor escuela. Posteriormente, formé parte del nacimiento de Lacontradejaen, pasé por Vivir Linares y ahora trabajo en El Observador.

 

Como periodista: ¿Cómo ves el momento actual del Periodismo en Jaén?

 

El principal problema del oficio en la provincia y en resto del país, es el paro y la precariedad con la que se trabaja. Cada vez está más degradado y peor pagado. Luego están las redes sociales. Quizá en un mundo menos digitalizado hubiera podido oponer resistencia, pero en el mercado en el que nos movemos actualmente es cruel, un violento caldo de cultivo en el que todas las ideas compiten entre sí para captar nuestra atención.

 Hoy prima el tráfico de visitas por encima del verdadero periodismo, que ha quedado en un segundo plano. La gente quiere inmediatez y se queda con el titular. Muy pocos usuarios de redes sociales leen la noticia, y se apresuran a comentar la información sin tener una opinión contrastada sobre lo que ha sucedido.

 Otra de las cosas que he detectado últimamente es la enorme influencia de los gabinetes institucionales en los medios de comunicación, sobre todo locales. El “corta y pega” se ha extendido de tal manera que algunos medios son auténticas cadenas de producción de noticias sin contrastar ni interpretar la nota de prensa. No existe trabajo de campo.

Puedo contar con los dedos de la mano las veces que he visto a un periodista negarse expresamente a aceptar sus objetivos o reducirlos de forma deliberada por una razón editorial.

 El periodismo actual, desde mi punto de vista, mendiga sin pensar en un plan de negocio, vive de subvenciones y publicidad institucional, que, por otro lado, no suele salir gratis.

También necesitamos lectores críticos, no consumidores de información. Sigo sin entender cómo artículos elaborados y contrastados caen en el cajón del olvido, mientras que otros, principalmente los negativos, son devorados como si no hubiera un mañana.

Por desgracia, no vivimos buenos tiempos para el periodismo, ya sea local, provincial, regional o nacional.  

 

Como emprendedor: ¿Cuáles crees que son las claves para emprender en una provincia como la nuestra tan necesitada de confianza, empleo y oportunidades?

 La principal motivación que debe mover a un emprendedor en Jaén o en otro lugar del mundo es tener claro el objetivo y cuál es el modelo de negocio que persigue, amén de conocer el mercado al que te diriges. Es decir, la oferta y la demanda.

 También es clave diferenciarte del resto de competidores, crear una marca propia y no desviarte del camino. No todas las ideas son buenas ni rentables.

Otro de los aspectos que destacaría para emprender es la implicación total en el proyecto. Difícilmente vamos a llegar al lector o al cliente si no ponemos ilusión en lo que hacemos. Y, sobre todo, ser constantes. No desfallecer por un revés o un mal día. Errores cometemos todos a diario, pero esto no nos puede bloquear ni apartar del sueño.    

 

La precariedad laboral es muy común entre los profesionales de los medios de comunicación, tu puedes presumir de seguir en la brecha a pesar de los obstáculos y las dificultades ¿qué es lo que te ha ayudado a reinventarte y a no perder la ilusión?

Que estoy enamorado de lo que hago. Es mi vocación, es lo que siempre he querido hacer, y encima cobro por ello. Cada día que me levanto, me gusta más este oficio, aunque, en más de una ocasión, he pensado en dejarlo y me he preguntado si merece la pena tanto esfuerzo. Sin embargo, al poco tiempo ese pensamiento desaparece de mi cabeza.

Lo que más me colma es seguir en las trincheras de la información, la calle, el contacto con la gente, en sentirme en algún momento útil.

Qué puede hacer la comunicación por una provincia históricamente acomplejada y que actualmente se siente maltratada por las distintas administraciones (COLCE, Cierre CI y Zara en Linares…)

Simplemente informar con la mayor veracidad y rigor posible. No es bueno dejarse llevar por el impulso del momento, por muy injusta que sea la información que manejas. Muchas veces es bueno dejar macerar la noticia y evaluar los datos que tienes antes de publicar nada. En definitiva, para impulsar el emprendimiento, hay que saber ESCUCHAR las señales del mercado y hay que MIRAR HACIA FUERA, para después poder aplicarlo a tu proyecto empresarial.

 

¿Cuál es tu Japuana a Jaén?

 Jaén es una buena tierra para vivir. Lo tiene todo, pero considero que necesita reinventarse, dejar de ir de víctima y construir un futuro cimentado en pilares sólidos que pasan, ente otras cosas, por apostar por la industria. Tener un plan B, C, D… al olivar. La depresión que sufre la provincia va más allá del ninguneo de las administraciones. Es un problema interno y endémico. Nos falta creer más en nosotros mismos. Amor propio y confianza.

 ¿Alguna frase que te haya inspirado o motivado en tu trayectoria?

Una frase que leí en el baño de cualquier pub que frecuentaba en aquellas largas noches de febrero: “Más que toda su preparación académica, la habilidad de interesarse por las cosas, vivir cada hora del día como periodista, estar atento a cada hecho importante que ocurra no solo en la ciudad donde viva, sino también en el país y en el mundo. El periodismo se ejerce de tiempo completo”.

Una premisa que siempre me acompaña: “Nunca llueve eternamente”.

 


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